Resumen
El concepto de ética (del griego, ethos, costumbre) ha estado siempre íntimamente relacionado con el concepto de moral (moral, del latín morus, quiere decir el bien), que es la voluntad de acción para hacer el bien1: la ética es “la doctrina de las buenas costumbres”; ambas han representado históricamente formas de conciencia social que surgieron por la necesidad que han tenido las diferentes clases sociales de establecer y organizar las normas de conductas de las personas, sus relaciones entre sí y con la sociedad en general, de acuerdo con sus propios intereses económicos y el modo de producción correspondiente, por lo que las concepciones éticas, morales, han cambiado en correspondencia con el devenir histórico de la humanidad.